PARA EL FORTALECIMIENTO DE LA FE.

San Marcos 5:21-34.

De este pasaje que acabamos de leer, quiero pedirles que observemos a dos personas.

(1) Jairo. San Marcos 5:22-23 “22Y vino uno de los principales de la sinagoga, llamado Jairo; y luego que le vio, se postró a sus pies, 23y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá”

– “Uno de los principales de la sinagoga” … La sinagoga es el lugar del culto del judaísmo, de la misma forma que la iglesia es al cristianismo. En los días del Señor Jesús estas sinagogas estaban administradas por tres personas quienes eran notables, queridas y respetadas por todo el pueblo.

Estos rechazaron a Jesús; en una oportunidad se unieron a los herodianos con el fin de destruirle porque había sanado a un hombre (San Marcos 3:1-6 “1Otra vez entró Jesús en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía seca una mano. 2Y le acechaban para ver si en el día de reposo le sanaría, a fin de poder acusarle. 3Entonces dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate y ponte en medio. 4Y les dijo: ¿Es lícito en los días de reposo hacer bien, o hacer mal; salvar la vida, o quitarla? Pero ellos callaban. 5Entonces, mirándolos alrededor con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y la mano le fue restaurada sana. 6Y salidos los fariseos, tomaron consejo con los herodianos contra él para destruirle”) Ellos acusaban al Señor Jesús de ser un endemoniado (San Marcos 3:22 “Pero los escribas que habían venido de Jerusalén decían que tenía a Beelzebú, y que por el príncipe de los demonios echaba fuera los demonios”)

(2) Una mujer desesperada. San Marcos 5:25-28 “25Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, 26y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, 27cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. 28Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva”

Ella padecía de flujo de sangre desde hace doce años. Levítico 15: 25 “Y la mujer, cuando siguiere el flujo de su sangre por muchos días fuera del tiempo de su costumbre, o cuando tuviere flujo de sangre más de su costumbre, todo el tiempo de su flujo será inmunda como en los días de su costumbre”) No puede tocar nada, porque lo hace inmundo.

Según la ley ceremonial judía es una persona inmunda; además, esta enfermedad la tiene completamente débil, la hace llevar una vida muy incómoda, continuamente está amenazada de muerte, como ya no tiene mas dinero para su curación los médicos la han declarado incurable.

== San Marcos 5:21 “Pasando otra vez Jesús” San Marcos 5:27 “Cuando oyó hablar de Jesús”

Ambos se enteran del Señor Jesús. Pero, Jairo por el cargo que tiene, líder de un movimiento religioso que quiere dar muerte al Señor Jesús; ¿tendrá el valor para acercarse públicamente a EL? ¿o lo hará de noche y a escondidas como ya lo había hecho otro de sus amigos? (San Juan 3:1-2 “1Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos. 2Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él) ¿Qué será de él después de esto? NO. Se acerca a Jesús a plena luz del día y en medio de una gran multitud como testigo.

La mujer desesperada y con temor, se acerca a escondidas

Ambos, uno con una gran posición social y religiosa; la otra muy humillada. Ambos escucharon de Jesús y se acercaron a EL.

Dios siempre nos da la oportunidad de escuchar del maravilloso amor que tiene por cada uno de nosotros. Dios siempre nos da la oportunidad de fortalecer nuestra fe. Lo hizo con ello, como lo esta haciendo con nosotros en este momento.

En una oportunidad Cristo Jesús dijo lo siguiente, San Mateo 17:20 “… si tuvieras fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y de pasará; y nada os será imposible”

“Nada os será imposible” Jairo le dijo: “Ven y pon tu mano sobre ella para que sea salva y vivirá”. La mujer dijo “si tocare tan solamente su manto seré salva”

Antes su fe estaba en las ceremonias religiosas o en la posición social o en la posición económica, o en los médicos; ahora han dejado todo, miran a Jesús y ponen su fe en EL.

Actualmente hay noticias que nos hacen temblar… No tengamos mas miedo, Cristo tiene poder para librarnos.

Dios te bendiga ricamente.

LA IGLESIA DEL SEÑOR JESUS.

Hechos 10:38. San Juan 14:12.

Permítanme comenzar con una observación.

– San Juan 1:45-46 “45Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret. 46Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve”

— “Hemos hallado… a Jesús… de Nazaret… ¿De Nazaret puede salir algo bueno?”

El nombre de Jesús de Nazaret es un nombre despreciativo que los judíos dieron al Salvador. Recordemos, sus padres vivían allí, por tanto, fue educado allí; y de Nazaret se tenía el concepto moral y religioso muy pobre; en mas de una oportunidad el Señor fue rechazado de la sinagoga de Nazaret (San Marcos 6:1-6 “1Salió Jesús de allí y vino a su tierra, y le seguían sus discípulos. 2Y llegado el día de reposo, comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos, oyéndole, se admiraban, y decían: ¿De dónde tiene este estas cosas? ¿Y qué sabiduría es esta que le es dada, y estos milagros que por sus manos son hechos? 3¿No es este el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él. 4Mas Jesús les decía: No hay profeta sin honra sino en su propia tierra, y entre sus parientes, y en su casa. 5Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos. 6Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos. Y recorría las aldeas de alrededor, enseñando”)

Ahora bien, Hechos 10:38 “cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo este anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él”

La persona ungida por Dios con el Espíritu Santo y con poder, es ahora una persona divina, el Hijo de Dios, ahora es el ungido de Dios, esto es, el Cristo. Y Dios lo ungió para, “anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo”

El mismo Señor Jesús, como hombre, nunca podría haber hecho todo lo que hizo si no hubiera sido ungido por Dios. Hizo lo que ningún ser humano en toda la tierra pudiera haber hecho, sencillamente porque tal o tales hombres no existen (Romanos 3:10 “Como está escrito: No hay justo, ni aun uno”)

Ahora bien, este Jesús de Nazaret, Cristo, el ungido de Dios; antes de ascender al Padre, nos dejo un encargo: San Juan 14:12 “De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre”

En los Evangelios podemos leer muchas de las obras que EL hizo, como sanar ciegos, sordos, paralíticos, y aun resucitar muertos. Y EL nos dice, “El que cree en mí, las obras que yo hago, el las hará también; y aun mayores hará”

Un milagro es una prueba del poder de Dios, ¿puede haber algo mayor? Yo creo que sí. Dios nos envió a predicar el Evangelio por todo el mundo “para que todo aquel que en EL crea no se pierda, más tenga vida eterna”

Una persona que acepta a Cristo como su Salvador personal, es uno muerto en sus delitos y pecados nacido para vida eterna, un ciego que ahora puede ver las maravillas de Dios, un sordo que ahora puede disfrutar la voz encantadora del Evangelio. La conversión de un pecador es la obra mayor que cualquier otro milagro; es un milagro de la gracia de Dios hecho posible por el inmenso amor de Dios hacia nosotros.

Pero, esa obra solo será posible, Hechos 10:38 “Dios lo ungió con el Espíritu Santo y con poder” (1) Solo es Dios quien hace esta obra y hoy vivimos bajo el Espíritu Santo. San Juan 14:26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho” (2) Con poder, para que nuestro ministerio de predicación sea efectivo. (3) Dios unge solamente para que hagamos el bien, todo lo contrario, es de Satanás. (4) Dios unge con el Espíritu Santo y con poder solo a “el que cree en mi” No va a venir sobre aquellos que viven en pecado o que aparentemente se han convertido o que no viven vidas de oración.

Todo esto lo aplicamos a nosotros. Una iglesia sin el poder del Espíritu Santo, aunque tenga una membresía de cientos o de miles o de millones, no importa la denominación, es una iglesia vacía. Un creyente sin el poder del Espíritu Santo, critica todo, todo le molesta, no se goza, con facilidad se ausenta de la congregación.

Cuando el Templo estaba por construirse, Dios advirtió: Zacarías 4:6 “Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos”

La iglesia, usted y yo, es aquella que ha sido levantada por la excelencia del poder del Espíritu Santo y no aquella donde solo se ve esfuerzos humanos. Hechos 10:38 “Porque Dios estaba con él”

Usted y yo, ¿Somos la iglesia del Señor?

POR EL CAMINO DEL DESIERTO.

Éxodo 13: 17-18.

Cuando dejamos de ser niños y nos convertimos en adultos, muchas veces, queremos tener nuestra propia familia; pero, como eso implica mucha responsabilidad y queremos ser buenos padres, empezamos a planificar nuestros días: primero hay que estudiar, trabajar, luego pensar seriamente en el matrimonio; y aunque planificamos de la mejor forma posible, no siempre resulta la familia perfecta, en alguna parte lo planificado se interrumpe; o se pierde el estudio, o se pierde el trabajo, o se pierde la familia.

Si en mi juventud usted me hubiera dicho: “Vaz a ser pastor de una iglesia en los Estados Unidos”, yo le hubiera contestado que eso es imposible, porque nunca estuvo en mis planes… pero, aquí estoy.

Permítanme decir algo más, nosotros planeamos, nosotros observamos cual es el mejor camino, pero es Dios quien nos toma de la mano y nos lleva por el camino que EL considera el correcto. No siempre lo que a nosotros nos parece lo correcto, es realmente lo correcto para Dios.

– Éxodo 13:17-18 “17Y luego que Faraón dejó ir al pueblo, Dios no los llevó por el camino de la tierra de los filisteos, que estaba cerca; porque dijo Dios: Para que no se arrepienta el pueblo cuando vea la guerra, y se vuelva a Egipto. 18Mas hizo Dios que el pueblo rodease por el camino del desierto del Mar Rojo. Y subieron los hijos de Israel de Egipto armados”

. El faraón ha dejado salir al pueblo judío de Egipto y para llevarlos a Canaán, que es la tierra a donde Dios los quiere llevar, hay dos caminos:

(1) El camino de la tierra de los filisteos. Esta tierra es Pentápolis, o tierra de cinco ciudades, Gaza, Ashkelon, Ashdod, Ekron y Gath; y según algunas personas que conocen la zona, significa diez días de caminar, aunque hay algunos que opinan que se puede hacer en tres días; muchos comerciantes van por allí.

(2) El camino del desierto del Mar Rojo, que significa cuarenta años de caminar.

. Si a usted le toca planificar el viaje, ¿Cuál camino usaría?

. Si Dios le ha prometido la tierra por donde fluye leche y miel, ¿Por qué no los llevo por el camino mas corto y por qué escogió el camino más largo?

Lo primero que puedo observar es que la mayor preocupación de Dios no es “darles ya” lo que necesitan, porque en ese camino corto pueden encontrarse con muchas sorpresas desalentadoras antes de encontrarse con lo prometido.

Tenemos una promesa: Cristo vendrá por su Iglesia; y EL quiere que usted y yo lleguemos victoriosos, no importa cuanto tarde, EL quiere que lleguemos victoriosos, a nosotros nos corresponde recorrer el camino de la fe.

– Dios da una razón por que no los llevo por el camino más lógico para nosotros.

Éxodo 13:17 “… Para que no se arrepienta el pueblo cuando vea la guerra, y se vuelva a Egipto”. Éxodo 13:18 “… Y subieron los hijos de Israel de Egipto armados”

Los filisteos eran un pueblo feroz, guerrero, muy valiente y gran enemigo de Israel; un pueblo fuertemente armado. Los israelitas, un pueblo que por muchos años han vivido como esclavos, están saliendo de Egipto armados, pero, ¿Qué tan bien armados pueden estar como para enfrentar a tan feroz enemigo? La libertad que ahora disfrutan desde hace un minuto, les hace creer que están preparados para la batalla, derrotar a los filisteos y entrar a Canaán… pero Dios sabe que no están preparados y así no llegarán; cuando se encuentren cara a cara, con solo verlos, querrán regresar a Egipto.

Ojo, es muy posible que estemos luchando con enemigos que Dios quiere que evitemos; no pensemos que enfrentándolos los vamos a vencer. Cuidado, ellos nos quieren regresar a Egipto. Licor, tabaco, drogas, fornicación, etc. etc., dejemos de batallar con ellos y sigamos en camino que Dios tiene preparado para cada uno de nosotros.

Éxodo 13:18 “Mas Dios hizo que el pueblo rodease por el camino del desierto del Mar Rojo”

No importa si es el más largo o el más corto, la preocupación de Dios somos usted y yo. Nuevamente, no luchemos con lo que Dios quiere que evitemos. El mejor camino es la soledad del desierto, usted y Dios, yo y Dios. En ese camino nos va a enseñar su Palabra, su amor, su sacrificio, su fidelidad.

Dios te bendiga ricamente.

REFORZAR SU FE.

Éxodo 3:1-9.

La Biblia, la Palabra de Dios y en especial el Nuevo Testamento, enfatiza el regreso de nuestro Señor Jesucristo, sin embargo, no dice cuándo ni cómo; sí expresa de algunas situaciones que sucederán antes de su venida, alguna de ellas es que habrá mucha incredulidad. El problema es, ¿cómo nos encontrará a usted y a mí?

Éxodo 1: 6-14 “6Y murió José, y todos sus hermanos, y toda aquella generación. 7Y los hijos de Israel fructificaron y se multiplicaron, y fueron aumentados y fortalecidos en extremo, y se llenó de ellos la tierra. 8Entretanto, SE LEVANTO SOBRE EGIPTO UN NUEVO REY QUE NO CONOCIA A JOSE; y dijo a su pueblo: 9He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros. 10Ahora, pues, seamos sabios para con él, para que no se multiplique, y acontezca que, viniendo guerra, él también se una a nuestros enemigos y pelee contra nosotros, y se vaya de la tierra. 11 entonces pusieron sobre ellos comisarios de tributos que los molestasen con sus cargas; y edificaron para Faraón las ciudades de almacenaje, Pitón y Ramesés. 12Pero cuanto más los oprimían, tanto más se multiplicaban y crecían, de manera que los egipcios temían a los hijos de Israel. 13Y los egipcios hicieron servir a los hijos de Israel con dureza, 14y AMARGARON SU VIDA CON DURA SERVIDUMBRE, en hacer barro y ladrillo, y en toda labor del campo y en todo su servicio, al cual los obligaban con rigor”.

Éxodo 2:23 “Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto, y los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su servidumbre”

Éxodo 3:7-9 “7Dijo luego Jehová: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactores; pues he conocido sus angustias, 8y HE DESCENDIDO PARA LIBRARLOS de mano de los egipcios, y sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y ancha, a tierra que fluye leche y miel, … 9El clamor, pues, de los hijos de Israel ha venido delante de mí, y también he visto la opresión con que los egipcios los oprimen”

— Permítanme resaltar dos términos expresados por Dios en este último pasaje: (1) “He visto la aflicción de mi pueblo”, (2) “pues he conocido sus angustias”; y decir lo siguiente: Dios conoce la condición todas y  de cada una de las personas, todos sus sentidos están sobre nosotros.

Quizás la condición de alguno es muy fuerte e incómoda, al grado tal que alguna vez nos hemos preguntado ¿Dónde esta Dios? Pues, sepamos que Las Escrituras nos dicen que Dios nunca nos da la espalda, no se desatiende de nosotros; no es ciego ni sordo; no estamos abandonados ni olvidados; por eso vale la pena venir delante de EL y poner en sus manos nuestras cargas… EL nos está esperando.

Hay por lo menos tres cosas que Dios nos toma en cuenta: (1) “He visto la aflicción de mi pueblo”, (2) “He oído su clamor (su clamor ha venido delante de mí)”, y (3) “sus exactores (quienes causan sus aflicciones)”. Es muy probable que no podamos gritar nuestras penas, de seguro que la sociedad nos va a señalar con el dedo o va a reaccionar con oídos sordos; mas Dios no esta sordo a las oraciones de sus hijos: nos mira, nos escucha, nos conoce y sabe quién es el que nos está causando mucho daño.

– Éxodo 3:8 “Y he descendido para librarlos…” Además, Dios, ha venido para sacarnos de “aquella tierra” y llevarnos a aquella “tierra buena y ancha”, para cambiar la calidad de nuestra existencia.

Dios en la persona de nuestro Señor Jesucristo, ha descendido para declararnos justos.

– San Lucas 18:7-8 “7¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles? 8Os digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?”

La incredulidad es algo que describe al mundo actual, y es muy probable que cuando el Señor Jesús regrese, el nivel de fe sea muy bajo. Los cristianos no debemos esperar que el mundo cambie, lo que debemos esperar es el regreso glorioso de Cristo. A pesar del mundo, la fe es quien nos inspira a persistir; por tanto, es importantísimo reforzar nuestra fe, y esto sólo con la oración.

Cuando Cristo vuelva, ¿seremos de aquellos que EL encontrará perseverando?

Hebreos 10:35-39 “35No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; 36porque os es necesaria la paciencia, para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. 37Porque aún un poquito, Y el que ha de venir vendrá, y no tardará. 38Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma. 39Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.

El conflicto que pudiéramos estar pasando, puede ser muy grande, pero pronto terminara. La fe (que mantiene nuestra vida espiritual) pronto será coronada con vida eterna allá en el cielo.

Cuando nos alejamos de Dios, nos acercamos a la ruina. Si vivimos por fe y morimos por fe, viviremos eternamente; es necesario ser paciente, esperar en oración. “Nosotros no somos de los que retroceden, sino de los que preserveran”

Dios le bendiga ricamente.