– Salmos 100.
V.1-3 “1Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. 2Servid a Jehová con alegría; Venid ante su presencia con regocijo. 3Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado”
Continuamente Dios pone a prueba nuestra adoración a Él a través de alguna enfermedad o conflicto familiar o de alguna otra manera.
Ahora bien, no es que Dios necesite de nuestra adoración, pero es su voluntad que lo hagamos, es su voluntad que estemos a su servicio, es su voluntad (sea cual sea el momento que estemos pasando) que reconozcamos que Él es Dios, y que Él nos hizo y no nosotros a nosotros mismos.
Yo leo en este Salmo, “Cantad a Dios… Servid a Dios…Venid a Dios…” pero que lo hagamos con un espíritu alegre; y sobre todo, hacedlo con un corazón agradecido, de ser “pueblo suyo y ovejas de su prado”
Leo en un diccionario de la lengua castellana la definición para la palabra GRATITUD: “Sentimiento de estima y reconocimiento que una persona tiene hacia quien le ha hecho algún favor o prestado algún servicio”
Dice al final del v.3 “Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado” No solo que somos sus ovejas y que por lo tanto tiene todos los derechos sobre nosotros, dice además, que somos ovejas de su prado. Nuevamente me voy al diccionario y busco la definición para la palabra PRADO: “lugar agradable, llano y cubierto de hierva que sirve de pasto al ganado, lugar en que se puede gozar” ¡Eso es lo que somos y esa es la forma como nos trata y sostiene! Motivos más que suficiente para vivir agradecidos a Dios. ¡No permitamos que la corriente del mundo nos desvíe de esta verdad!
Ahora bien, lo contrario de la gratitud es la ingratitud o falta de agradecimiento, “persona que olvida con facilidad los beneficios recibidos” ¿Por qué el mundo rechaza a Dios? ¿Por qué crímenes? ¿Por qué tantas faltas? Porque hemos olvidados quienes somos y quien nos da la vida y sostiene.
– Permítanme resumir lo expresado hasta ahora:
… v.3 “Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado”
(1) Jehová es Dios; único y verdadero Dios, infinitamente vivo y perfecto. No una criatura producto de la fantasía humana o de algunos obreros que le dieron forma y le adoran.
(2) Ese Ser eterno es nuestro creador, nos dio cuerpo, alma y espíritu.
(3) “Pueblo suyo somos” Es nuestro soberano, nos gobierna; y por lo tanto hacemos sus mandamientos.
(4) Somos “ovejas de su prado” Es nuestro generoso benefactor; nos cuida y sostiene.
… v.5 “Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones”
(5) “Dios es bueno”, por tanto, solo hace el bien.
(6) “Para siempre es su misericordia” MISERICORDIA: “Inclinación a sentir compasión por los que sufren, y ofrecerles ayuda. Cualidad de Dios por la cual perdona los pecados de las personas” Mientras que la justicia trata a cada individuo según sus merecimientos; la misericordia trata al criminal muy diferente de lo que merece ser tratado. Y eso en Dios, es una fuente que nunca se acaba.
(7) “Y su verdad por todas la generaciones” Su Palabra permanecerá para siempre, ninguna caerá al suelo como anticuada u obsoleta.
… Razones más que suficientes para vivir una vida agradecidos a Dios. Por eso, cada vez, v.4 “Entrad por sus puertas con acción de gracias, Por sus atrios con alabanza; Alabadle, bendecid su nombre”
Dios te bendiga ricamente.